Vas a montar un negocio pero aún no has elegido el tipo de sociedad a constituir. Oyes palabras como sociedad anónima, sociedad limitada, comunidades de bienes... pero ¿cuál de ellas es la más adecuada para tu negocio?
Como asesoría en Cuenca para particulares, autónomos y empresas, nos gustaría sin el menor compromiso, poder analizar de forma aislada cada caso personal, pues las características de cada proyecto o modelo de de negocio marcan los detalles necesarios para tomar la decisión adecuada. No obstante, te damos algunos pequeños detalles y te invitamos a visitarnos para poder ofrecerte el asesoramiento y la información necesarios para que tomes la mejor decisión, y si lo deseas, te acompañaremos en todo el proceso.
Hablamos de los modelos de sociedades:
Sociedad de Responsabilidad limitada.
Es una de las fórmulas más habituales en ella los empresarios no tienen que responder de forma personal con su patrimonio ante las posibles deudas. Su socios cuentan, como su nombre indica, con una responsabilidad limitada, ya que el capital social de la entidad se divide en participaciones. Para su constitución son necesarios 3000€. No existe ningún inconveniente en ser un único socio y la principal ventaja es que los socios no responden con su patrimonio antes las posibles pérdidas.
Sociedades anónimas.
Su capital consta de acciones que pueden ser transmitidas de forma libre y para su constitución se requieren 60.000€. La responsabilidad de cada socio se limita por el capital aportada inicialmente.
Sociedades colectivas.
En este tipo de sociedades es de suma importancia el papel de los socios, ya que no sólo aportan capital sino que ellos mismos aportan su trabajo y gestionan la empresa. Responden ante las deudas de forma ilimitada y no existe un mínimo de capital.
Sociadades comandatarias.
Su fórmula es muy similar a la enterior, pero pudiendo haber socios que no se encarguen directamente de la empresa. Por ello, existen socios colectivos y socios comanditados que limitan su responsabilidad en la sociedad acorde al capital aportado. Estas sociedasdes no quequieren de un capital mínimo.
¿Y el empresario individual?
Podemos hablar de sociedades donde el propio autónomo es quen ejerce el control absoluto de la empresas, siendo él mismo el que responde con su capital propio y bienes personales ante las deudas.
En otro artículo trataremos las diferentes modalidades y características de cada tipo de sociedad. Mientras tanto quedamos a vuestra entera disposición para analizar y asesorar a todo interesado en la constitución de una nueva sociedad, como asesores que somos, para elegir la mejor formula y explicaros bien todos los detalles de cada una de ellas.